El nuevo tramo de 14 kilómetros de la autovía A-68 entre las localidades zaragozanas de Figueruelas y Gallur entró en servicio el pasado 23 de marzo, con un acto oficial en el que participaron el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y el Gobierno de Aragón.

El proyecto, redactado por Ineco para la Demarcación de Carreteras de Aragón, ha consistido en la duplicación de calzada y acondicionamiento del trazado de la carretera N-232 para convertirla en una vía de gran capacidad.

El tramo soporta un tráfico de 13.000 vehículos diarios, de los que más del 50% son vehículos pesados, y se suma a los 28 kilómetros de autovía que ya están en servicio entre Zaragoza y Figueruelas. Cuando finalicen las obras de la siguiente sección, hasta Mallén, hacia finales de 2022, se completará un eje de más de 80 kilómetros de autovía desde Zaragoza hasta Alfaro, en La Rioja.