Para una ciudad como Madrid y su área metropolitana, la mayor de España con 7,3 millones de habitantes, las infraestructuras subterráneas –metro, cercanías, vías urbanas soterradas, intercambiadores etc.– son imprescindibles para asegurar la fluidez del sistema de transporte. Sin ellas, el espacio en superficie sería incapaz de absorber un volumen de viajeros que, solo en metro, suma 677 millones de usuarios al año, según datos de 2019 de Metro de Madrid.

De las más de 300 estaciones de la red, la de Sol es con diferencia la más transitada, con 24,4 millones de viajeros en 2019. Aunque no es el único récord que ostenta: también es la más antigua, ya que fue cabecera de la primera línea inaugurada en 1919 en la capital, Sol-Cuatro Caminos. Desde la gran ampliación de 2009, cuenta con la caverna de andenes más grande del mundo, con más de 200 metros de longitud, 20 de ancho y 15 de alto.

DESNIVEL DEL TÚNEL. Perfil del túnel, donde se aprecia el desnivel de 12 metros existente entre la estación de cercanías de Sol y la de metro de Gran Vía. La accesibilidad está garantizada gracias a la instalación de cuatro rampas mecánicas.

Tras esta obra, que siguió a la puesta en servicio del nuevo túnel entre las dos grandes estaciones ferroviarias de Atocha, al sur, y Chamartín, al norte, Sol se reabrió como intercambiador de cercanías, enlazando tres líneas de metro y dos de cercanías, situadas en el nivel más profundo. Aquí, al final de la gran caverna de andenes, se excavó una galería peatonal para conectar con otra histórica estación del suburbano madrileño, la de Gran Vía, situada a poco más de 100 metros, bajo la calle Montera. Tan solo se ejecutó la estructura, y el túnel permaneció clausurado mientras se acometían las obras del ramal de cercanías y metro.

Ineco se ha encargado de redactar el proyecto y dirigir para Adif los trabajos de puesta en servicio de la galería, que se iniciaron en 2018 y se retomaron a principios de 2021, mientras se ultimaba la ampliación de la estación de Gran Vía, a cargo de la Comunidad de Madrid. Ambas obras se coordinaron y finalmente se inauguraron al mismo tiempo en julio de 2021. La nueva galería peatonal aumentará el flujo de viajeros a una estación que ya figuraba entre las más utilizadas. Según estimaciones de Metro de Madrid, 22.000 usuarios más cada día se sumarán a los 44.000 que ya pasaban por ella.

Claves de una obra en profundidad

En 2009, durante la remodelación de la estación de Sol, se perforó la galería de sección abovedada de unos 120 metros de longitud por 5,7 de anchura, ejecutada íntegramente en hormigón armado mediante excavación en mina. Discurre paralela a la calle Montera, sobre la vertical del túnel ferroviario, y salva un desnivel ascendente hacia la Gran Vía de aproximadamente 12 metros.

El proyecto redactado por Ineco en 2018 detalla todo lo necesario para hacerla funcional: revestir los paramentos de hormigón con materiales antivandálicos, realizar las instalaciones para los sistemas de iluminación, ventilación, seguridad, protección contra incendios, comunicaciones, señalización, control de acceso y máquinas autoventa a la entrada de la estación de Gran Vía; y colocación de cuatro grandes rampas mecánicas para salvar el desnivel. Ineco también se hace cargo para Adif de los servicios de dirección facultativa, y coordinación de seguridad y salud de las obras, que ha ejecutado Tragsa.

Además de la coordinación con otras grandes actuaciones que se estaban llevando a cabo, los trabajos conllevaron la complejidad derivada de operar en el subsuelo a 20 metros de profundidad. A ello hay que sumar el hecho de que se ejecutaron con la estación de Sol plenamente operativa. Por ello, para introducir las rampas mecánicas, que inicialmente se había previsto realizar desde la Gran Vía, se recurrió al uso de dresinas –vehículos de transporte sobre las vías (1)–, que las llevaron hasta los andenes por tramos (2). Una vez allí, se izaron hasta la mezzanina (la planta intermedia situada sobre los andenes, donde se ubica la galería), con un sistema de polipastos (3); y de ahí se desplazaron mediante plataformas rodantes hasta el túnel (4 y 5), donde se introdujeron en los fosos existentes (6). Estas operaciones requirieron de una cuidadosa planificación y una gran precisión, para no provocar daños en la estación, y se llevaron a cabo en horario nocturno para no interferir con el funcionamiento habitual.

COLOCACIÓN DE LAS RAMPAS.

Otro aspecto singular que cabe destacar es el uso de la galería como sistema de evacuación en caso de emergencia: por su morfología y singularidad, y en coordinación con Renfe, Adif y Metro, se ha instalado una señalización de evacuación que corresponde con un diseño del sistema de protección contra incendio y ventilación coordinado, que permite utilizar la galería en varios supuestos de emergencia previstos, dependiendo de la ubicación donde se originen.

Nueva estación de Gran Vía: historia por fuera, vanguardia por dentro

La Gran Vía es una de las avenidas más emblemáticas y reconocibles de la capital. Su construcción, entre 1910 y 1931, supuso el primer gran avance urbano de Madrid hacia su futuro como gran ciudad europea y discurrió paralela al desarrollo de la red de metro y otras infraestructuras y equipamientos de la ciudad. Un templete de estilo art decó del arquitecto gallego Antonio Palacios –autor también, junto con Joaquín Otamendi, de otros edificios icónicos de la ciudad como el Palacio de Comunicaciones de la plaza de Cibeles o el Círculo de Bellas Artes, entre otros– cubrió la entrada a la estación de metro de Gran Vía, llamada inicialmente Red de San Luis, hasta su reforma en 1970. Si bien la estructura original se trasladó entonces a la localidad natal de su autor, en Porriño (Pontevedra), donde se conserva, para la nueva estación se ha construido una réplica fiel que recupera la armonía arquitectónica del entorno. Al mismo tiempo, el interior, completamente accesible, se ha ampliado y dotado con los sistemas y equipamientos más modernos.

Las actuaciones, en detalle

EN LA GALERÍA

  1. Actuaciones puntuales de sellado de juntas en el túnel.
  2. Revestimiento de paramentos: pavimento, paramentos verticales y falsos techos.
  3. Instalación de encaminamientos y bandas de advertencia.
  4. Colocación de 4 rampas mecánicas sobre los fosos existentes, flanqueando las escaleras fijas centrales de unos 2 metros de ancho en tramos de 6 escalones.
  5. Redistribución de peldañeado en la escalera central existente.
  6. Sectorización de la galería.
  7. Señalización comercial y evacuación.
  8. Dotación de instalaciones: Iluminación, ventilación, seguridad y CCTV, comunicaciones y PCI.

EN LA PLANTA MEZZANINA DE LA ESTACIÓN

  1. Ejecución de cuartos de instalaciones necesarios.
  2. Tendido de instalaciones necesarias para la colocación de máquinas autoventa y tornos para control de accesos.
  3. Dotación de cuarto de conteo y zona de atención al cliente.
  4. Instalación de encaminamientos y bandas de advertencia.
  5. Dotación de teleindicadores y equipamiento.
  6. Señalización comercial y evacuación.

EN LA PLANTA DE ANDENES

  1. Tendido, a lo largo de los andenes, de cableado de electricidad y comunicaciones.